Carlos Fenoll, por Palmeral 2012

lunes, 6 de febrero de 2012

Sonetos a Cristo



Como buen hijo nacido en la "Orihuelica del Señor", Carlos era creyende y muy devoto de su Semana Santa oriolana, que ha sido declarada Fiesta de Interés Turísitico en 2010. Prueba de su fe son los numerosos poemas como este "A Cristo", como "Cristo yacente" (1942) o "Cristo en la primavera" (1951), y varias pulicaciones en las revistas Semana Santa y Momento. La Semana Santa es para un oriolano más que subir al cielo, puesto los clarinetes y el retumbar del tambor lo llevan en la sangre. Las posturas religiosas entre Miguel (1) y Carlos eran totalmente opuestas.

En dos cartas Manuel Martines Marín, podemos aperecir la devoción a la Samana Santa Olecense y en general a los religioso, veamos:

1.-
Querido amigo F. M. Marín: A pesar mío, por obligaciones imprevistas e insoslayables, no te he escrito hasta hoy. Hace ya no sé los días que recibí con la alegría de todos los años de miresidencia aquí, nuestra revista de Semana Santa. Siempre me ocurre lo mxsmo^ la recibo como un sediento un poquito de agua Una sola gota esjara mi sed espiritual de Orihuela esta revista que habla de ella y la refleja La cojo varias veces al día y la releo, y así hasta que me sacxo y... la olvido ¡Oh humana condición! (Barcelona, 10 de abril de 1952)

2.-
Hoy, la nota más destacada de Barcelona es la actividad febril en los últimos preparativos del Congreso Eucarístico. Verdaderos encambres de obreros pintan, retocan, pavimentan Monumentales cruces y fuentes luminosas surgen de sus manos Sera algo grandioso. Ouien vea y viva esta exaltación de la fe los días del Congreso, lo contará a sus nietos como una de las maravillas mas grandes que vio en su vida. Empezará así: «A finales de mayo de 1952, entre millares y millares de peregrinos de todo el mundo, blancos, negros, cobrizos y amarillos, yo asistí al Congreso Eucarístico de Barcelona, y aquello...».
Un abrazo a Efrén y otro, fuerte, para ti de Carlos.
(Barcelona, 13 de mayo 1952)



A CRISTO

Se fue empañando, bajo el surtidor
de cruzadas espinas, la tersura
del Espejo de toda la hermosura,
de todo Amor y de todo Dolor.

Al cerrarse sus ojos, ni la flor
ni el pájaro, ni vida alguna pura
vieron el sol, sino la más oscura
noche del mundo, y sola, en derredor.

Y como un inquietante mensajero
fue el silencio invadiendo los caminos,
envolviendo en su angustia todo hogar.

«¡Pecadores, miradlo en el madero!
Ha muerto por vosotros. Sus divinos
labios de luz acaban de expirar...»

Carlos Fenoll, publicado en "Momento" Semana Santa Olecense, el Domingo de Ramos era 29 de marzo de 1942.

1)Miguel Hernandez tuvo dos etapas religiosas, la primera porpia de la que estudio con los jesuistas del Colegio Santo Dominga (Estudiada de Vicente Mugica)y la transcresora en Madrid tras una profunda crisis ideológica y religiosa, se va volviendo plenamente consciente de todo este entramado político en que se vio implicado y del papel que él mismo había representado. Y que le costó su amistad con Ramón Sijé. Carta a Juan Guerrero Ruiz en mayo de 1935:

Ha pasado algún tiempo desde la publicación de esta obra [el auto sacramental] y ni pienso ni siento muchas cosas de las que digo allí, ni tengo nada que ver con la política católica y dañina de "Cruz y Raya", ni mucho menos con la exacerbada y triste revista de nuestro amigo Sijé [El Gallo Crisis] [...] Estoy harto y arrepentido de haber hecho cosas al servicio de Dios y de la tontería católica.