Carlos Fenoll, por Palmeral 2012

viernes, 10 de febrero de 2012

COMPÁS NOSTÁLGICO


(Centuria Romana de Orihuela)


Suenan tambores. —¡Y dentro
de mi corazón! Por plazas
y por calles, los tambores
suenan—. ¡Y dentro de mi alma!
Dentro de mí suenan, suenan,
suenan tambores fantasmas,
aquellos tras los que yo,
por el viento de mi infancia,
iba volando —y cayendo—
aquellas semanas santas.

Suenan tambores de ayer
en mí: de hoy, por las plazas
y las calles... Hoy, ayer,
sonando en Semana Santa.
Pero ayer, ¿por qué, decidme,
siendo todo hojadelata,
todo pintura, a mis ojos
fueron de oro y de plata
resplandecientes los cascos
empenachados, las lanzas,
los petos y los escudos
de la Centuria Romana?

¿Por qué al Señor le corría
sangre viva por la espalda,
sangre de verdad... que yo
veía que le saltaba?
¿Por qué, temblando entre olores
frescos y puros del alba
del Viernes Santo, entre luces
de cirios que palpitaban
como pétalos y estrellas,
temblando entre llamaradas
de honda emoción, yo creía
que era inminente, que estaba
la tierra a punto de abrirse,
tronando bajo mis plantas?

Decidme, ¿no lo sabéis?
¿No sabéis que era de plata
mi inocencia, y que era de oro
mi corazón, y mi alma
un tenue aroma del cielo...?

¡Si, sí! Avivad mi nostalgia,
tambores de hoy. ¡Que yo
oiga aquellos que sonaban
ayer..., cuando aún no sabía
lo que era llorar sin lágrimas!

Carlos Fenoll, Semana Santa, Orihuela 1945