Carlos Fenoll, por Palmeral 2012

domingo, 5 de febrero de 2012

HORA MALDITA


(Huerta de Orihuela)


Todo canta, sin duda, a su albedrío
la ventura de estar vivo y despierto
bajo el grito del sol: la calle, el huerto,
el pájaro, la flor, el aire, el río...

Todo canta, sin duda, en torno mío,
mas todo, hasta el amor, está ya muerto
para mí en este instante —que no acierto
nunca a vencer— de espeso y lento hastío.

Esta es, aquí esta la hora maldita:
no es la piel de la noche tan oscura
ni la angustia mortal tan infinita.

¡Alma, rasga tu noble vestidura,
que es la hora que a mí me precipita
a un infierno de alcohol y de locura!


(Transcripción de Manuel Molina y de García Selma)

En la transcripción de Vicente Ramos del último verso (IEA.mayo 197, p.70), dice
"a un infierno de amor y de locura", a falta de ver el original.

Carlos Fenoll, Intimidad Poética, abril 1943